ESCAPADA TXAPELDUN

En la Nafarroako Klasikoa, la Euskadiko Selekzioa junior masculina reivindicó el instinto del ciclista euskaldun para ir en busca de las fugas. Así aprendió la juventud de hoy a ver al equipo naranja en lo más alto de este deporte hace 20 años. Poniendo en práctica lo aprendido en la televisión, este sábado en Zegama varios equipos salieron con la intención de buscar una fuga de nivel en los primeros kilometros. Los ciclistas locales del equipo AMPO desempeñaron un papel importante en este trabajo. En el primer paso por Zegama, en el kilómetro 11, se formó un sexteto en cabeza de carrera con Ander Otegi Ariztimuño y Kepa Ormazabal Galdós del equipo AMPO, Iñigo Uria Cuadra del equipo Alimco, Arkaitz Suso Arakama del equipo Invitec, Oskitx Egiguren Santamaria del equipo Baque y Unax Betelu Mencia del equipo Iruki.

Los seis corredores rápidamente abrieron hueco en busca de la primera subida del día. En la primera ascensión a Lierni Suso se descolgó de la escapada y el equipo Alimco impuso un fuerte ritmo y aunque la diferencia se redujo, el esfuerzo de los fugados logró que la escapada sobreviviera. El mismo guión continuó en las dos siguientes subidas a Lierni, pero no en el tercer descenso de Lierni. Allí se formó un importante grupo de contraataque partiendo desde el pelotón con nombres destacados. En ese quinteto estaban: Marco Martín Cuevas (BAQ), Hodei Muñoz Gabiña, (ALI), Eneko Olveira Rodrigo (JRG), Ekhi Uriarte Leizea (ALI) y Eñaut Urkaregi Sanz (GTO). Este quinteto rápidamente empezó a recuperar los 2 minutos que perdían al inicio de la subida a Barbari. Del grupo de contraataque subiendo Barbari se quedaron solos Martín y Muñoz mientras el quinteto fugado se mantuvo unido. En el descenso a Barbari, el zegamarra Ander Otegi, tras haber bajado mil veces ese descenso entrenando, atacó y se distanció junto a Oskitx Egiguren. Por detrás marchaban Ormazabal y Betelu, haciendo a modo de enlace con el grupo principal en el que quedaban 12 corredores con una desventaja de más de un minuto.

En la última subida a Barbari, Oskitx se adelantó a la habilidad mostrada por Otegi en el descenso, y a falta de kilómetro y medio, el bizkaitarra atacó. Aunque Ander Otegi se mantuvo en todo momento a 15 segundos de distancia, no pudo lograr la hazaña de ser txapeldun en casa y el maillot y la txapela fueron para el corredor de Baque. La medalla de plata fue para el zegamarra y Hodei Muñoz cerró el podio con la medalla de bronce.